Colombia tiene la fortuna de estar rodeada por dos océanos, el atlántico y el pacífico; por tanto son muchas las playas, las zonas costeras, los municipios y los pueblos tropicales que poseen un despliegue arquitectónico acorde a estas características climáticas. En este artículo los invitamos a conocer una casona que representa, fielmente, muchos de los aspectos que conjugan el lenguaje tradicional con el diseño actual de estos tipos de construcciones. Un proyecto de la firma CÉLIA ORLANDI POR ATO EM ARTE.
Al ingresar nos encontramos con un vestíbulo luminoso en el que se destaca una escalera de madera y vidrio templado. Los detalles empiezan a aparecer; muebles de madera y accesorios propios del lugar como los sombreros.
Nos recibe una primera visión de la casa y con ella apreciamos que posee un marcado tono campestre desde la entrada, pues un gran antejardín la precede.
El diseño de la casa vincula el exterior con el interior, como esta habitación, cuyas grandes puertas de cristal permiten la entrada de la luz natural.
Si algo caracteriza a las casonas o fincas colombianas son los corredores. En este caso los apreciamos amplios, tanto que pueden disponerse distintos muebles para el descanso o para socializar.
El mimbre es uno de los materiales más codiciados para la elaboración de muebles, de hecho, en las regiones cálidas suele ser bastante popular el mobiliario hecho con él. Un ejemplo claro, son los dos sillones que están ubicados en una de las salas de esta casa.
Los diseños de las casas viejas colombianas tenían las cocinas en la parte de atrás, así mismo ocurre con esta casona, que conserva esta disposición que en muchos casos los unía a jardines o solares.
Bastante típico de las zonas tropicales son los sillones de cuero; en esta casa por ejemplo, nos encontramos con dos que se unen a cojines de texturas.
Pensado para reuniones de familias numerosas, este comedor de diez puestos es lo suficientemente grande. La lámpara de techo se une a la decoración y los cuadros de fondo ilustran escenas naturalistas que van de maravilla con el contexto del lugar.
Nuevamente aparece el cuero como material protagonista y junto a él la madera, esta vez usada como trama para los ventanales.
Esta fotografía nos presenta otra perspectiva de la cocina, aquí observamos el extractor de olores, los muebles y los demás electrodomésticos que hacen parte del espacio. Un detalle importante son los baldosines pintados, que le dan un toque festivo al lugar. Si tu interés son las cocinas, te invitamos a leer este artículo: ¡20 cocinas modernas, simples y fabulosas!
El baño, de colores absolutamente vibrantes nos ofrece una visión alegre y festiva. Los muebles clásicos, las baldosas y los baldosines, configuran un ambiente amable con un sello único.
En contraste con el primer baño, nos encontramos con un segundo baño, bastante moderno de diseño y cuyo principal elemento decorativo es el mosaico en paredes y piso.
Las flores son un símbolo que se relaciona con los ambientes tropicales, de hecho, es común encontrar cubrelechos con motivos naturales que celebren la belleza de las plantas.
Además de los motivos florales, los tonos pasteles son muy utilizados en las casas de regiones tropicales. En este caso, las camas y las mesas de noche están pintadas con estas gamas de color.
Un infaltable de este tipo de propiedades son las piscinas. El caluroso clima, el campo y la frescura del ambiente, son perfectos para el esparcimiento es una alberca de aguas cristalinas.
Para la diversión de los más pequeños está pensada una extensión de la piscina principal. De un nivel bajo, esta opción es perfecta para los niños o para la tomar el sol sentados conversando.
Solo imaginen, salir al balcón y ver una piscina al frente, mientras le das la bienvenida a un día que empieza. La naturaleza y el agua que se unen para el máximo confort.