Iluminar con plafones

Cristina Jiménez Cristina Jiménez
Brooklyn, Luz Difusion Luz Difusion Phòng học/văn phòng phong cách công nghiệp
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Los plafones son lámparas que se colocan pegadas al techo y, por tanto, son ideales para iluminar estancias pequeñas y, sobretodo, espacios con escasa altura en los que colocar una lámpara suspendida resultaría poco funcional y sobrecargaría la estancia. Al igual que ocurre con las lámparas más convencionales (lámparas suspendidas), podemos encontrar plafones de diferentes estilos, disponiendo de opciones válidas para los diferentes tipos de estancias e, incluso, plafones para exteriores. 

Los plafones son más discretos que las lámparas suspendidas, al no descolgar del techo, y por ello tienen un menor protagonismo en la estancia en la que se colocan. Aunque su presencia en la habitación sea menor, en ningún caso debemos descuidar su diseño y disposición, y es que también en luminarias tipo plafón encontramos multitud de diseños diferentes que pueden variar la percepción que tengamos del espacio en el que se coloca. Al igual que ocurre cuando elegimos cualquier lámpara, cuando elegimos un plafón para una estancia hemos de pensar en el diseño del propio espacio para que el modelo de plafón se adecue a la propuesta de decoración que hayamos escogido para ella. Pero también va a ser muy importante a la hora de elegir un plafón el tener en cuenta determinadas prestaciones para asegurarnos de que estamos eligiendo el tipo de iluminación adecuada para el lugar en el que va a ir colocado. Debemos estudiar bien las características técnicas tanto del plafón como de la bombilla interior para garantizar que el grado de iluminación que llegue a los objetos a iluminar sea lo que necesitamos pues, si estos detalles son importantes para cualquier lámpara, lo es más aún cuando nos decantamos por un plafón ya que va a ir más separado del plano a iluminar y la propia lámpara se encuentra recubierta por el difusor del plafón. Te ofrecemos algunas pistas para ayudarte a acertar en la elección de un plafón para tu cualquiera de las estancias de tu vivienda.

Plafones para baños

Los plafones son luminarias muy utilizadas para la iluminación de baños, pues normalmente se trata de espacios de pequeño tamaño en los que se necesita una iluminación general. Los plafones son muy fáciles de instalar y nos aportan esta iluminación uniforme que normalmente compatibilizaremos con unos focos situados junto al lavabo. También para los baños existen multitud de diseños y tamaños entre los que elegir, como este original plafón cuadrado de diseño minimalista que os mostramos en la imagen.

Plafones de gran tamaño

Dependiendo de la dimensión del espacio a iluminar y del nivel de iluminación que sea necesario en la habitación, tendremos que elegir la potencia lumínica de las lámparas a instalar. La potencia lumínica es la cantidad de luz que emite una bombilla y se expresa en lúmenes (lm). A mayor cantidad de lúmenes, más intensidad de luz. 

Si necesitamos gran cantidad de lúmenes, podemos optar por colocar varias fuentes de luz en la misma estancia o elegir un plafón que incorpore varias bombillas, como el que os mostramos en la imagen. En esta habitación que, debido a su tamaño tiene unas altas necesidades lumínicas, se opta por un único plafón para relsover la iluminación, evitando así sobrecargar un espacio ya dotado de gran riqueza decorativa.   

Plafones bien integrados

El diseño del plafón que elijamos debe ser, como hemos comentado, acorde al tipo de decoración elegida para la habitación en la que lo vamos a colorar. Actualmente en el mercado es posible escoger entre un sinfín de opciones, teniendo a nuestro alcance los diseños más variados, por lo que un plafón resulta una opción perfecta para cualquiera de las estancias de una casa actual y para todos los estilos de decoración. Los modelos modernos permiten jugar a repartir la iluminación entre varios plafones, de dimensiones más reducidas, en lugar de colocar sólo uno de mayor tamaño en el centro de la habitación.

El diseño que os mostramos, incluye versiones de pared y techo pudiendo crear con ellos divertidas combinaciones. Estos plafones Lumiere proponen, en definitiva, nuevas geometrías pero realizadas con sabiduría artesanal por maestros vidrieros, y son capaces de caracterizar el espacio aportando un gran dinamismo.

Plafones en zonas húmedas

A la hora de instalar un plafón en un baño es importante que nos aseguremos de que las lámparas estén especialmente diseñadas para el baño, ya que se trata de un espacio con un alto índice de humedad, lo que provoca que una luz convencional se estropee con mayor rapidez. Debemos revisar, entonces, el Índice de Protección (IP) que mide el nivel de protección que un aparato eléctrico tiene respecto a la humedad y el polvo. El plafón que coloquemos en estos espacios más húmedos (también en exteriores) deberá contar con una lámpara cuyo índice de protección frente a la humedad sea alto.

Luz cálida o luz fría

Actualmente, podemos contar con plafones que admitan tipos de luz diferente. Para decantarnos por unas o por otras, además del factor económico y de pensar en el ahorro energético, es importante tener en cuenta otras características técnicas asociadas a cada tipo de lámparas: temperatura de color, indice de reproducción cromática, potencia, etc.

Las lámparas incandescentes siempre van a aportar una luz cálida, que acentuará los tonos amarillos y marrones; mientras que los fluorescentes generan una sensación más fría, al enfatizar los colores azules y verdes. Decantarse por unas o por otras dependerá del tipo de luz que requiera la actividad que vayamos a desarrollar pero también del tipo de diseño del espacio. Por ejemplo, en el interior de la imagen, donde se apuesta por materiales modernos e industriales, tiene todo el sentido elegir una luz algo fría para los plafones que van colocados directamente sobre el hormigón visto del techo.

Plafones colocados correctamente

La iluminación es una de las variables más influyentes a la hora de plantear la decoración de un hogar moderno. La luz en una vivienda no sólo cumple una función obvia de utilidad,al permitirnos desarrollar determinadas actividades cuando no podemos usar la luz natural, también tienen una importante función estética. Para que la iluminación cumpla ambas funciones, será necesario elegir la luz correcta y adecuada para cada habitación (conforme al uso, el equipamiento,… ) y un tipo de lámpara acorde con el tipo de espacio y la decoración del mismo. 

Iluminar con plafones puede ser una solución muy acertada cuando contamos con espacios pequeños o cuando no queremos que las luminarias elegidas cobren gran protagonismo en la estancia. La ubicación de los apliques debe estar bien planteada, especialmente si, como vemos en la imagen, se van a colocar varios plafones en un mismo espacio, de manera tal que difundan una luz homogénea y generen un atractivo juego en el plano del techo.

Tipos de lámparas para los plafones

Además de ser cuidadosos a la hora de elegir el diseño del plafón, deberemos pensar en el tipo de luz que es más adecuada para el espacio que hemos de iluminar: si preferimos luces halógenas, florescentes, bombillas, LED… Cada tipo de luz tiene sus beneficios y unas características particulares. 

A nivel doméstico, lo más común tradicionalmente ha sido la luz incandescente (las típicas bombillas), las halógenas de baja potencia y, más recientemente, las halógenas de bajo consumo; también se han usado los fluorescentes, aunque generalmente vinculados a la cocina. Hoy en día las bombillas LED están entrando con fuerza en los hogares, puesto que su precio se ha abaratado mucho respecto a las primeras que se comercializaron y suponen un importante ahorro energético al ser altamente eficaces (necesitan mucha menos energía para emitir la misma cantidad de luz).

Texturas y colores

En definitiva, si buscas darle un toque diferente a tu casa, la utilización de plafones puede ser una herramienta de la que echar mano para conseguirlo. Cambiando el tipo de luminarias, su disposición o la combinación de estas podemos dar un nuevo aire a cualquier estancia. 

Si buscamos un toque de contemporaneidad para un interior podemos optar, por ejemplo, por este plafón Brooklyn que resulta muy decorativo debido a los dos aros cónicos de medida y acabado distinto que rodean el cristal difusor. La combinación del color negro con el brillo del cromo pulido y el difusor de cristal satinado constituyen acabados de lo más actuales y conseguiremos una luz difusa muy agradable.

Luz y color sin límites

La iluminación siempre ha sido un efectivo recurso utilizado para dar vida a una estancia, pues consigue mejorar el ambiente de una habitación, dramatizar texturas de los paramentos, acentuar determinados elementos, etc. 

Podemos incluso introducir color en la iluminación. Para ello podemos decantarnos por plafones dotados de difusores de algún color o, haciendo uso de las nuevas tecnologías, podemos instalar lámparas led que varíen de color y de intensidad permitiendo que la iluminación cambie, adquiera diferentes tonos y genere sensaciones diferentes. Este es el recurso utilizado en el interior que os mostramos para crear un ambiente realmente especial.

Plafones originales

Cabe la posibilidad de que lo que busquemos sea una iluminación donde lo que prime sea su función decorativa por encima de la funcional. Se tratará entonces de una iluminación más puntual, cuyo objetivo sea el de realzar algún elemento decorativo o simplemente poner en valor la propia luminaria elegida. Para ello, existen plafones con formas realmente novedosas y originales, como estos que os mostramos en la imagen diseñados por expertos de Barcelona  que podemos encontrar en homify. Estos globos de luz son perfectos para iluminar cualquier dormitorio infantil creando un mundo de fantasía para los más pequeños de la casa.

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